martes, 30 de julio de 2013

PERTURBAR AL TURISTA


En mi habitación
-donde me refugio atrincherado-
el calor ha empezado a derretir
los óleos del hotel Fénix.

He vaciado el minibar,
Steve Buscemi reparte más licor
recorriendo el pasillo,
pero yo no le abro
-no me gusta su eco nasal-.

Sobre la alfombra
Jackie Daniels
descansa vacío junto a míster Belvedere,
elevan sus vapores
hacia mi estómago y las sienes.
-¡Cierra la boca Stevie!-.

Espío a través de la persiana de rejilla
-primera línea de playa-,
nadie se refugia en mecedoras
de agua y sal,
sólo arena bajo las sombrillas,
el tumulto
está de camino.

Aguardo su llegada para abrir la puerta,
marcar los lienzos con los dedos
y pintarme la cara
-señales de guerra-.
Hay que perturbar al turista.

jueves, 18 de julio de 2013

¿PUEDE UN HOMBRE AMAR A LA MUJER MÁS TRISTE DEL MUNDO?

De puerta en puerta y esquina en esquina
Arthur Miller recuerda con tres ramos de flores
que después de la caída
los músculos de la espalda
no pueden unirse ad hoc
como las notas de sus guiones para Gable.

Las mujeres tristes huyen oxigenadas,
con los pies por delante
y las uñas lacadas arriba y abajo.
No hay nada más que aportar a la consumación del drama
salvo el color de las rosas y los tulipanes
y la postal del forense.

miércoles, 3 de julio de 2013

SINGING IN THE RAIN


La vida es nuestra
una noche de tormenta
en que nos despellejamos
la carne
bailando claqué
sin zapatos
en la ribera del río, bajo los manzanos.
Quebramos los cielos de agosto,
me conviertes en Gene Kelly
y yo te veo vestida
con un torrente de agua
dulce.
A los postres
no dejamos ni las semillas
de la manzana.
Agosto roto
y nuestro sudor para estañarlo.